Los Colao

Text Box: Actividades
Bautismos
Bodas
Calendario
CasaCristo
Redentor
Caballeros  Colón
Cenizas
"Charlie"
Communicate
Coro de Niños
Dolorosa
Donaciones
 Editoriales
Educativos
Email 
Ensayos 
Fátima
Galería 1
Galería 2
Galería 3
Galería 4
Himnos 1
Himnos 2
Himnos 3
Himnos 4
Himnos 5
Historia
Homilias
Horarios
Hosp. Pedriático
Juventud
Mi♪0rcoles Ceniza
Ministerio de
SagradaFamilia
Música
Navidad
Nostalgia 1
Nostalgia 2
Niño Jesús
Nuestra Gente 1
Nuestra Gente 2
Oraciones
Pascuas 1
Pascuas 2
Pediátrico Reyes
PediátricoReyes 
Portada
Powerpoint
Presentaciones
Providencia
Quinceañeras
Ramos
Rosario
Rosario Masivo
Sanación
San Juan
Santo Nombre
Semana Santa
Tour-Gráfico I
Tour Gráfico 2
Tour Gráfico 3
Tour Gráfico 4

Videos

Misa de Gallo
Misa Año Nuevo
Domingo de Ramos
Jueves Santo
Viernes Santo
Sabado de Gloria
Domingo de
Resurreccón.

Powerpoint
Presentaciones

LOS COLAO - ¡Qué Guame! Nacimos en un país de vivos. El boricua es campeón absoluto del quitao. Desde los tiempos del expansionismo español hasta el presente, y seguramente en el futuro, hemos sabido buscar lo nuestro. Buscamos o pedimos todo lo que se puede. Le sacamos el jugo a lo disponible en el momento y despues despreciamos su fuente como zapato viejo. Los ideales, la fe, la familia, los compañeros, el trabajo, la iglesia, las asociaciones y los gobiernos tienen todos su precio y su tiempo de provecho. Los usamos cuando necesitamos. Pero sabrás que en el momento que no se necesitan, se convierten en estorbo, en exceso. La retórica, los mítines, las paradas, conferencias, los partidos, comités y paneles están todos sujetos al intercambio y a la negociación. Todos buscando su guiso y punto. Y el que te diga diferente te miente. Aquí se jura lealtad a todos los santos hasta que aparezca otro más lindo.

Si te das cuenta, estas tendencias se reflejan en nuestro diario vivir. En la calle, los choferes no resisten esperar en una fila ordenada, así facilitando el tránsito. Se tienen que colar. No importa que al colarse crean mayores disturbios para sus compueblanos. Si no se cuelan, se sienten inferiores, se perdieron la oportunidad de adelantarse, aunque sea de manera inadecuada. No les importa un pepino el bien común, ni las tribulaciones de sus hermanos isleños. Se montan en tribuna en la radio, TV y los periódicos criticando los que están bregando con los problemas sociales, políticos y morales del país, hablando pestes y blasfemia. Estos mismos que cuando estaban en el guiso, buscaron lo suyo y no velaron por los intereses del ciudadano común. Ahora están afuera buscando como colarse de nuevo. Estos sucios hasta se atreven a calumniar a nuestro Monseñor por sus obras de reconciliación y paz.

Si vas al mercado vemos como nuestros hermanos puertorriqueños llenan las filas de cobro con sus hijos y familiares, a ver cual fila llega primero. En las plazoletas prefieren ver la gente comiendo de pie a cederle una mesa o una silla por guardarle el sitio a sus amistades, no importa cuanto tarden. En los conciertos separan 20 asientos para colar a sus panitas. Si buscas permisos o documentos en las oficinas del gobierno, no vayas a menos que tengas pala, alguien que te cuele. Los malos ratos que vas a pasar con la burocracia y padrinismo boricua te puede llevar al llanto, desolación y quiebra. Cuando ven que alguien está regalando o distribuyendo algo, se matan y se pelean por coger lo de ellos, aunque no tengan idea que es lo se está dando. Les gusta el dinero ajeno pero no el compromiso mutuo. Lo quieren todo por nada.

En nuestros templos, vemos como todo tiene temporada. Algunos cristianos de nuestra preciosa Isla del Encanto, esperan buscar de Dios, cuando hay enfermedad, tragedia o espectáculo. Mientras la cosa vaya bien, ni mencionan a Dios, ni se recuerdan de su templo. Pero cuando no encuentran donde más buscar entonces invocan a nuestro Señor. Cuando se aprieta la cosa, recuerdan sus rosarios y los horarios de las misas. Y para colmo cuando llegan todo tiene que estar a su gusto. Las canciones, la temperatura, la gente, el parking, la homilia y Dios libre que se le pida un donativo, porque vay y se molestan. La Iglesia tiene que estar nítida. Aunque no hayan visitado, ayudado, llamado, orado, ni arodillado en ella. Se molestan si todo no está a su gusto. Dios libre. Si en su visita anual al templo a recoger su palmita, en Domingo de Ramos, tienen inconvenientes. Bajan santos y se aseguran de comunicarles a los otros feligreses su disgusto. Porque ellos sí saben como debe estar la Iglesia. Tenemos que esperar su visita annual con ansias, a una hora cómoda, conseguirles un valet parking en frente del templo, darles un desayuno caliente a la entrada, sentarlos en el mismo altar y anunciarles a la congregación lo divino de su presencia y hacer la misa a nombre de ellos. Ya que se molestaron en aparecerse, hay que mimarlos y regalarles una palma completa.

Nuestras lealtades no deben estar a la venta, nuestros ideales no deben ser negociables y nuestra fe no debe tener temporada. Antes de ser político, patriota o cristiano, hay que ser hombre primero. No ser una de las tantas niñas que existen en este país. La responsabilidad que tiene cada ciudadano es equivalente al compromiso de cada cristiano con su Dios. Cualquiera puede buscar lo fácil. Cualquier gusano se puede colar. Evitar el trabajo y el compromiso que tiene cada persona con su pueblo y con su Dios es decisión individual. Si usas a tu gente y a tu país a tu conveniencia, tu ayuda tambien vendrá así. Y si tu compromiso con Cristo tiene temporada, tus recompensas de paz y misericordia tambien lo tendrán.

Nuestro Salvador no se carga en el bolsillo como un amuleto. No se saca del cuarto para la visita. No se monta en vitrina cuando te veas perdido. Cristo tiene que estar en tu mente, en tu corazón y en tu alma, todo el tiempo. Sólo así podrás crear un ambiente feliz, tranquilo, cristiano y progresivo para tí, tu familia, tu tierra y tu Dios. Podrás colarte aquí y allá, pero por las puertas del reino de Dios, no se cuela nadie.                   Luis Nieves Sánchez, SSN.